Érica Santana
Reportera de la Agencia Brasil

Brasilia - Familias con renta entre tres y diez salarios mínimos mensuales (US$ 365 y US$ 1.217) podrán comprar computadoras más baratas por medio del programa de inclusión digital del gobierno brasileño, el PC Conectado. El programa consiste en exención fiscal para la industria y en crédito diferenciado para el consumidor, con intereses de hasta el 2% al mes. Todas las computadoras del programa tendrán software libre. El anuncio fue hecho este jueves (12) por el asesor especial de la Presidencia de la República, Cezar Álvarez.

En Brasil, el 79% de la población nunca usaron computadora; el 89% nunca accedieron a Internet y sólo el 14,4% tienen acceso regular a computadora. De acuerdo con Álvarez, el programa ofrecerá dos ventajas directas: la exención de impuesto del 100% de las contribuciones sociales (PIS/Cofins) en el momento de la venta al consumidor final – lo que significa que los equipos que ya están en el mercado hoy, tendrán su precio reducido en un 9,25% – y el combate a la piratería.

"Es una exención muy fuerte, la industria sabe que jamás hubo una política tributaria con esa dimensión y esperamos con eso atacar el contrabando y combatir el llamado mercado 'gris': el producto de poca calidad", afirmó el asesor.

De acuerdo con Álvarez, el programa también tiene dimensiones de política industrial. "Nosotros iremos a producir más, para más gente, y cuanto más gente compre, serán generados más empleo, más renta, más producción y más competitividad". El beneficiado del PC Conectado podrá adquirir una computadora de mesa con una configuración mínima de hardware exigida por el gobierno, 27 programas (softwares) instalados, soporte técnico y derecho a un programa especial de conexión a la Internet. El precio será de hasta US$ 568 (R$ 1.400), financiados hasta dos años y con posibilidad de acceso a la Internet por 15 horas mensuales, a US$ 2,84 (R$ 7,50) al mes.

El programa utilizará recursos del Fundo de Auxilio al Trabajador (FAT) para conceder crédito al consumidor.

Traducción: Alicia Rachaus