Brasília - El presidente Luiz Inácio Lula da Silva se reunió ayer con el primer ministro de Japón, Junichiro Koizumi. La relación comercial nipobrasileña fue uno de los asuntos discutidos en el encuentro.
Desde 1997, Japón tiene superávit en la balanza comercial con Brasil (vende más de lo que compra). En 2001, el déficit comercial de Brasil llegó a US$ 1.007 millones, bajando en 2002 para US$ 249,591 millones y en 2003 para US$ 209,872 millones. En ocho años, el único superávit brasileño se registró en 1996: US$ 263,358 millones.
Lula y Koizumi conversaron también sobre el futuro de las relaciones nipobrasileñas, comentando el centenario de la inmigración japonesa para Brasil, en 2008, y la presencia importante de la comunidad brasileña en Japón.
Temas de la agenda multilateral, con énfasis en la reforma de las Naciones Unidas y en la cooperación internacional para la promoción de la paz, de la seguridad y del desarrollo, también se discutieron.
La cooperación en el sector de explotación de recursos de energía y de infraestructura fue otro tema importante discutido en el encuentro. El primer ministro, dijo que con su visita pudo constatar que el país "se desarrolla con vigor, superando las adversidades rumbo a la consolidación del desarrollo estable".
Según el presidente Lula, Brasil y Japón tienen "indiscutible" vocación para ocupar una silla permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU). Lula apoyó la renovación de las instituciones de la ONU y le pidió apoyo a Japón.
Lula aceptó la invitación hecha por Koizumi para visitar a Japón en un futuro próximo.
Agencia Brasil
Reportero: Daniel Lima
Traductora: Alicia Rachaus
17/09/2004