Marcos Chagas e Iolando Lourenço
Reporteros de la Agencia Brasil
Brasilia - La victoria del candidato de la base del gobierno a la presidencia de la Cámara, Aldo Rebelo del Partido Comunista Brasileño (PCdoB-SP), ex ministro de la Coordinación Política del gobierno Lula, fue celebrada por los partidos aliados por reanudar la normalidad de los trabajos legislativos y como forma de buscar la credibilidad afectada por las denuncias de corrupción involucrando a diputados federales y el propio ex presidente de la Casa, Severino Cavalcanti del Partido Progresista (PP-PE).
"Aldo tiene credibilidad y conducirá el rescate de la pauta, por medio del diálogo con todos", afirmó el líder del Partido Socialista Brasileño (PSB), Renato Casagrande (ES).
El candidato derrotado José Thomáz Nonô deseó que el nuevo presidente "reciba el espíritu de la Cámara y que sea independiente, altivo y autónomo". Y añadió: "Espero que Aldo olvide la coordinación política (del gobierno) y que sea el presidente de que esta Casa necesita".
Así que Aldo Rebelo obtuvo los 251 votos, número suficiente para garantizarle la victoria, el líder del gobierno en el Senado, Aloízio Mercadante del Partido de los Trabajadores (PT-SP), fue a saludarlo y subrayó que "Aldo va a rescatar la dignidad de la Casa. Él demostró a lo largo de su vida pública la capacidad de diálogo y negociación. Fue una disputa democrática y respetuosa".
Traducción: Alicia Rachaus