Thaís Brianezi
Reportera de la Agencia Brasil
Manaus – Fiscales de la Directiva de Protección Ambiental (Dipro) del Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama) sobrevuelan el llamado Alto Río Envira, frontera entre Brasil y Perú.
"Vamos a continuar el levantamiento aéreo por ocho o diez días más, pero los datos preliminares muestran que no hay explotación de madera en el territorio brasileño o ella está siendo hecha sin que se vea" informó el viernes (3) a la Radiobrás el asesor de la Dipro que acompaña las acciones en la frontera entre Brasil y Perú, Kleber Alves.
Esa retirada ilegal de madera fue detectada por funcionarios del puesto Feijó, de la Funai, localizado a las orillas del Río Envira, cuando algunas maderas de caoba fueron llevadas por las aguas, a principio del año.
Alves informó aunque en 2001 que fue creado el Grupo de Cooperación Ambiental Brasil-Perú, del cual él hace parte. "Hace dos años, tras la invasión de madereros peruanos en la tierra indígena del río Amonia donde viven los Ashaninka y en el Parque Nacional de Serra do Divisor, intensificamos las operaciones en la región. Algunas de ellas habían sido realizadas con la Policía Nacional Peruana y el Inrena Instituto de Recursos Naturales de Perú, que cumple el mismo papel del Ibama".
Traducción: Alicia Rachaus