Brasilia - Una de las principales acciones del gobierno para 2005 en el área de infraestructura, si aprobada por todas las instancias previstas en la ley, será la integración de la cuenca del río San Francisco a otras del nordeste brasileño.

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva afirmó que quiere llevar agua a la región, recordando que en 1952, por falta de oportunidad, fue obligado a dejar su terruño, y explicó que para cumplir este compromiso, su gobierno ha reservado US$ 394 millones (R$ 1.070 millones) del presupuesto de 2005.

El gobierno cree que si el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables aprueba la obra y el Congreso Nacional la refrenda, ésta empieza en febrero, con la construcción de dos canales que suman 720 kms., con estaciones de bombeo y minihidroeléctricas, empresa que costará US$ 1.600 millones (R$ 4.500 millones).

Por los cálculos del ministerio de Integración Nacional, 15 millones de personas resultarán favorecidas con la obra. El agua, que correrá por canales de hormigón armado, se usará prioritariamente para consumo humano, y el gestor del sistema evaluará la posibilidad de liberar excedentes para agricultores e industriales.

Agencia Brasil
Reportera: Juliana Cézar
Traductor: Jaime Valderrama
1º/12/2004