Monterrey, México, 13/1/04 (Agência Brasil - ABr) - La Declaración de Nuevo Leon, firmada por los 34 jefes de Estado participantes en la Cumbre Extraordinaria de las Américas incluye propuestas del gobierno brasileño, como implantación del seguro desempleo, renta mínima, acceso a la salud, con tratamiento del Sida y enfermedades tropicales como paludismo y dengue.
En rueda de prensa, el presidente Luis Inacio Lula da Silva explicó que fue la primera vez que una Cumbre Americana discute el desarrollo social del continente, condición del gobierno brasileño para la realización del encuentro, y destacó la colaboración entre los gobiernos en el combate a la corrupción en los sectores público y privado ofreciendo medios de recuperar el dinero desviado y de extradición de los responsables.
El párrafo de la Declaración de Nuevo Leon que menciona el Área de Libre Comercio de las Américas (Alca) se mantuvo como Brasil quería, con una mención genérica al bloque económico sobre la reunión de Miami en la que los países apoyaron el acuerdo sobre la estructura y el calendario adoptado para la conclusión de las negociaciones del Alca dentro de los plazos previstos.
Los gobernantes se comprometieron a adoptar acciones concretas antes de la próxima Cumbre de las Américas, en 2005 en Argentina, donde los presidentes hablarán sobre los avances logrados en el área social.
La Declaración de Nuevo Leon registra como compromiso para el crecimiento económico y reducción de la pobreza la activacion de políticas macroeconómicas consistentes, políticas monetarias y fiscales más eficientes, tasas de cambio adecuadas a la diversificación de la economía y mejora en la competitividad. Los jefes de gobierno reconocen que las micro, pequeñas y medianas empresas constituyen un instrumento fundamental para el crecimiento económico, la creación de empleos y la reducción de la pobreza en el área.
Los países americanos apoyaron la facilidad de acceso al crédito y a nuevas tecnologías para reducir los costes administrativos y asumieron el compromiso de adoptar medidas legales, normativas e institucionales, antes de la próxima Cumbre para simplificar los procedimientos y reducir el tiempo y coste de establecimiento de las empresas de cada país en la región, y reafirmaron el compromiso de avanzar en la agenda de Doha para favorecer todas las economías, especialmente las en desarrollo, además del apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para que triplique hasta 2007, con programas y préstamos, a las pequeñas y medianas empresas.
Los participantes en la Cumbre reiteraron también los compromisos de luchar contra todas las formas de crimen transnacional, como narcotráfico, tráfico de armas y formas de terrorismo asumidos en la Declaración sobre Seguridad en las Américas, aprobada en la Conferencia Especial sobre Seguridad, en México, en octubre de 2003.
Todos los participantes en la Cumbre hicieron un apelo a los países para que ratifiquen la Convención Interamericana Contra el Terrorismo, las 12 convenciones y protocolos de las Naciones Unidas. La Cumbre Extraordinaria de las Américas es la primera desde los atentados del 11 de septiembre de 2001. (JV)