FAO quiere programas sociales brasileños para África y Latinoamérica

08/03/2006 - 10h17

Spensy Pimentel
Reportero - Agencia Brasil

Porto Alegre – La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) espera asociarse con el gobierno brasileño, para que hasta el fin del año, los programas de convivencia con la sequía y de apoyo a la agricultura familiar, a través de la compra de la producción del país, ayude a combatir el hambre y la pobreza en África y Latinoamérica.

La afirmación fue del asesor especial de la Presidencia de la República, José Graziano da Silva, que esta semana asume la coordinación de la FAO para Latinoamérica y Caribe. El Lunes (6), él participó en encuentro con el director general de la entidad, Jacques Diouf, y con el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva, antes de su viaje a Inglaterra.

Según Graziano, Diouf subrayó a Lula la "necesidad de Brasil compartir sus experiencias exitosas" en esas áreas. La idea de instruir a técnicos de otros países en la construcción de cisternas y otras pequeñas obras de convivencia con la sequía surgió de una sugerencia de la FAO, informó Graziano.

Según Diouf, el 80% de los casos existentes de hambre grave en el mundo se relacionan principalmente a sequías y inundaciones. "Brasil es uno de los pocos países que tiene una experiencia en el semiárido comprobada de pequeñas obras de irrigación", dijo Graziano.

La idea de exportar el programa de compra de alimentos de la agricultura familiar tiene el objetivo de sustituir los alimentos distribuidos en regiones pobres, por los organismos de las Naciones Unidas. Muchas veces se utilizan géneros europeos y estadounidenses, y la idea es distribuir alimentos comprados de los campesinos de las propias regiones auxiliadas por la ONU.

La meta es colaborar para el desarrollo local. "La distribución de alimentos extranjeros genera más hambre, que soluciona el problema del hambre. Elimina empleos y impide que el pequeño productor se mantenga", afirmó Graziano.

Traducción: Andréa Alves