El Kuarup se realizó próximo a sitios arqueológicos

28/08/2005 - 15h28

Spensy Pimentel
Enviado especial

Alto Xingu – El Kuarup, homenaje tradicional a los muertos ilustres del Xingu, se realizó este año próximo a los sitios arqueológicos, cuya descubierta rindió un artículo, en 2003, en una de las principales revistas científicas del mundo, la estadounidense Science. La aldea de Ipatse, de los Kuikuro, que actualmente tiene menos de 500 habitantes, se sitúa próxima al local dónde un grupo liderado por Michael Heckenberger, de la Universidad de Florida, mapeó, en los últimos años, vestigios de la presencia de una población superior a 50 mil personas – hoy, en todo el parque, el número de habitantes es de cerca de 5 mil.

Dos de los principales jefes de Ipatse, Afukaká Kuikuro y Urissapá Tabata Kuikuro, firmaron el artigo de la Science en conjunto con el grupo del arqueólogo. "Escogemos a los dos jefes como forma de indicar una colaboración más extensa de la comunidad en la investigación", explica el antropólogo Carlos Fausto, del Museo Nacional de la Universidad Federal de Rio de Janeiro, que integró el grupo que hizo las descubiertas.

Los vestigios indican la existencia en el Alto Xingu, en el siglo XIV, de aldeas estructuralmente similares a las actuales, pero más fuertes y con fosos. Tenían áreas de hasta 500 mil m² y población de 5 mil habitantes. Los Kuikuro, que consideran los vestigios como los de sus ancestrales, conforme transmitido a ellos oralmente, fueron fundamentales para la descubierta de las 19 aldeas. Caminos de cerca de 5 kilómetros de extensión y hasta 50 metros de anchura unen las aldeas.

La ocupación humana en la región del Xingu tiene cerca de 1.000 años, según los estudios. El presidente de la Fundación Nacional del Indio, Mércio Pereira Gomes, que también es antropólogo, acuerda que la región sufrió gran reducción poblacional tras la llegada de los colonizadores europeos. "Sólo actualmente estamos llegando al mismo nivel de población que había en el fin del siglo XIX", dice.

Mércio estima que los actuales niveles de fecundidad, con crecimiento poblacional de cerca del 4% al año, duplican la población a cada 12 años. Él dice que la instalación de pozos artesianos en la aldea, con suministro de agua potable, fue uno de los principales factores responsables por la reducción en la mortalidad infantil, que, calcula, alcanzaba a 200 niños por cada mil nacidos vivos, hace algunas décadas.

Para más informaciones sobre las investigaciones arqueológicas en el Xingu, consulte el libro "Os povos do Alto Xingu–história e cultura", organizado por Bruna Franchetto y Michael Heckenberger.

Traducción: Andréa Alves