Ana Paula Marra

Brasilia - Los integrantes del Consejo Nacional de Desarrollo Económico y Social presentaron este jueves un manifiesto por una rigurosa investigación de las denuncias de corrupción, porque según ellos, sólo con esa medida urgente la sociedad brasileña tendrá la clara percepción de que la impunidad no prevalece, sino la justicia.

El documento, leido durante la XIII reunión del Consejo, ante el presidente Luiz Inacio Lula da Silva, se analizará en el próximo encuentro, previsto para dentro de dos meses.

Los miembros del Consejo piden a los parlamentarios que paralelamente a las investigaciones en curso, retomen el ritmo normal de Congreso, y que demuestren que principalmente en momentos difíciles, ponen el interés nacional sobre cuestiones partidarias y personales de sus integrantes, explicando que si los trabajos del legislativo siguen su curso normal, podrá demostrarse que Brasil es mayor que la crisis política, que las instituciones funcionan plena y democráticamente, sin interrumpir el desarrollo social y económico.

Los consejeros recomiendan a Lula y a los presidentes del Senado Federal, Renan Calheiros, y de la Cámara de Diputados, Severino Cavalcanti, que comanden personalmente, junto a las legítimas representaciones políticas del pueblo brasileño, la aprobación de una reforma política consistente y discutida democráticamente, lo que debe ocurrir este año para que entre en vigor en las elecciones generales de 2006. Ellos afirman que sólo así el pueblo brasileño podrá estar seguro de que no se repetirán las irregularidades recientemente denunciadas, y que la conducción de los destinos del país no estará sujeta a composiciones indeseables en los aspectos éticos y morales.

El Consejo de Desarrollo Económico y Social tiene como función asesorar al presidente de la República en la formulación de políticas y lo forman doce representantes del gobierno federal y 90 de la sociedad civil.

Traducción : Jaime Valderrama