Luciana Vasconcelos
Enviada especial
Nueva York (EE.UU.) - Representantes de África y del G4 - grupo formado por Brasil, Alemania, la India y Japón - discutieron la reforma en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, Estados Unidos.
El ministro de Relaciones Exteriores brasileño, Celso Amorim, dijo que la reunión fue positiva y que hay más puntos en común que divergentes entre los dos bloques. África quiere un asiento más en el Consejo como miembro no permanente que lo previsto en la propuesta. Además, hay divergencias con relación al poder de veto. "En tesis, todos somos en contra la discriminación en la cuestión del veto. Unos quieren acabar y a otros les gustaría que existiese de manera igual. Tenemos que tener una visión realista de lo que es posible", afirmó Amorim.
Quedó arreglado que hasta el día 22 un grupo con representes del G4 y de los países africanos discutirá la propuesta de reforma. El día 25 los ministros de Relaciones Exteriores vuelven a encontrarse. "Espero que podamos consagrar una nueva posición común. Tenemos que estar listos para las diferencias", dijo Amorim.
El proyecto del G4 propone aumentar de 15 para 25 países el número de integrantes en el Consejo. Sugiere aún, aumentar para 11 el número de integrantes permanentes, con un representante de América, uno más de Europa, dos de Asia y dos de África. La expectativa es que la propuesta se vote todavía este mes en la Asamblea de la ONU. Si se aprueba, en septiembre deberán definirse los países que harán parte.
En la propuesta, el G4 renuncia por 15 años el derecho de que sus votos tengan el poder de veto. Después de eso una nueva ronda de negociaciones sería abierta para decidir si los nuevos países tendrían o no ese poder. El veto de sólo uno de los miembros permanentes puede hacer con que la decisión no se apruebe por el Consejo de Seguridad.
Traducción: Alicia Rachaus