Bruno Bocchini
Reportero Agencia Brasil
São Paulo - El coordinador del Movimiento Nacional de Derechos Humanos, Ariel de Castro Alves, consideró que la decisión de la Justicia de absolver al coronel Ubiratan Guimarães puede generar sanciones internacionales, porque ello da a la policía licencia para matar, explicando que ahora los agentes pueden entrar en cárceles e instituciones de reclusión de menores y matar a las personas con la disculpa de estricto cumplimiento del deber legal, con jurisprudencia del Tribunal de Justicia de São Paulo, lo que para él es absurdo y lamentable.
Por veinte votos a dos el Tribunal de Justicia de São Paulo absolvió al coronel de la Policía Militar Ubiratán Guimarães, condenado en 2001 a 632 años de prisión por la muerte de 102 prisioneros en el complejo penitenciario de Carandiru, en 1992.
Los desembargadores del Tribunal consideraron válido el juicio de 2001, pero decidieron rever la sentencia de la Jueza Maria Cristina Cotrofe, que lo condenaba. Para ellos, el deseo de los jurados no fue bien evaluado por la jueza.
El coordinador del Movimiento Nacional de Derechos Humanos declaró que espera que el Ministerio Público rechace la decisión del Tribunal para que el recurso sea apreciado lo antes posible, se anule la decisión y vuelva a ser juzgado por un jurado popular.
El fiscal del caso, Antonio Visconti, dijo que el Ministerio Público puede recurrir de la decisión ante el Superior Tribunal de Justicia.
Traducción : Jaime Valderrama