Marli Moreira
Reportera de la Agencia Brasil

São Paulo - El ministro de la Justicia, Márcio Thomaz Bastos, garantizó hoy que el gobierno actuará con todo el rigor necesario para punir los responsables por la muerte de la misionera Dorothy Stang, de 73 años, asesinada a tiros, la madrugada del pasado sábado, en Anapu, estado del Pará. La reacción del Estado tiene que "ser severa, implacable", dijo Bastos. Él sintió mucho lo ocurrido y dijo que conocía la monja norteamericana y su trabajo. Naturalizada brasileña, Dorothy actuaba con la comunidad de colonos y asentados al norte del país, área de gran disputa económica, involucrando la venta ilegal de tierras.

Márcio Thomaz Bastos informó que está acompañando las investigaciones. "Lo que hay allí es una tierra en situación tensa, donde no había la presencia del Estado, y ahora están actuando los Ministerios del Medio Ambiente, de Desarrollo Agrario y de la Integración Nacional, tornando la exploración económica un trabajo organizado, y no predatorio. Y eso está provocando una reacción muy grande de personas que no están acostumbradas a la convivencia democrática y civilizada, tampoco se someten al imperio de la Ley", declaró el ministro.

Bastos dijo que espera una solución rápida porque hay varios sospechosos. La busca se dificulta porque la región es muy grande, y llueve mucho. El gobierno envió más ayuda, incluso un avión.

Traducción: Alicia Rachaus