Brasília, 22/7/2004 (Agência Brasil) - El consejo de Control de Actividades Financieras, del ministerio de Hacienda fiscalizará a partir de agosto las cuentas bancarias de los empleados públicos federales, y si constatados movimientos extraños, informará a la Contraloría General de la Unión para que confronte la información con la declaración de impuesto de renta.

Esta operación está prevista en la Estrategia Nacional de Control al Lavado de Dinero, y además se creará un canal de recibo de denuncias de indicios de riqueza.

El ministro de Control y Transparencia de la Contraloría General de la Unión, Waldir Pires, dijo que la operación está vinculada a la consolidación del proceso democrático, que debe velar por los derechos y garantías de los ciudadanos e impedir que se violen los intereses esenciales de la sociedad.

Reportero: Benedito Mendonça
Traductor: Jaime Valderrama