São Paulo, 17/6/04 - Agência Brasil - El uso internacional de la madera extraída de la Amazonia fue tema de debate hoy en la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (Unctad XI) , en reunión promovida por la Organización Internacional de Maderas Tropicales.
El gobernador del estado de Acre, Jorge Viana, uno de los invitados a hablar sobre su experiencia en manejo forestal y uso comercial de madera tropical para exportación, aseguró que el comercio de madera en Brasil, que manejó US$ 6 millones el año pasado, dentro de poco tiempo será el gran competidor del sector agrícola, y recordó que el manejo sostenible es importante pero que no se puede olvidar a la comunidad local, que debe recibir beneficios de tales acciones.
Viana añadió que existe una distancia grande y peligrosa entre los que industrializan y los proveedores de materia prima extraída del bosque, que hay que disminuir porque las comunidades locales no pueden continuar recibiendo precios tan bajos, y que la mejor forma de conservar la floresta amazónica es usándola sosteniblemente, a través de productos certificados.
Por su lado, el secretario de Medio Ambiente y Desarrollo del Estado de Amazonas, Virgilio Viana, dijo que es inconcebible que todo el mundo diga que hay que preservar la floresta amazónica, por su valor natural, pero no se acuerde de las personas que viven allí, muchas veces en situación de pobreza inaceptable.
El secretario lanzó una propuesta de reducción de tarifas e impuestos sobre productos forestales certificados para lograr precios competitivos en el mercado internacional, que contó con el apoyo del gobernador del Acre, y éste recordó que ya existe la certificación del producto forestal, pero que aún es insuficiente.
Viana dijo que hay que tener mucho cuidado para que no ocurra lo mismo que en São Paulo, con el fin del Bosque Atlántico, afirmando que el turismo degradante no interesa a la Amazonia, y que hay que hacer con que los recursos de las empresas de turismo se compartan con la población local.
Reportero: Eduardo Mancasz
Traductor: Jaime Valderrama