Adriana Franzin
Reportera Agencia Brasil

Brasilia - El Consejo Nacional de Salud envió este jueves al Ministerio de Salud, documento que recomienda la quiebra de la patente de tres medicinas contra el Sida, lopinavir, efavirenz y tenofovir, cuya compra cuesta anualmente US$ 335 millones (R$ 800 millones).

La resolución aprobada por los 20 consejeros también orienta hacia el fin de las negociaciones con los laboratorios productores de las mencionadas medicinas, explicando que hace más de dos años el ministerio intenta acuerdos con ellos, y que una cápsula de lopinavir le cuesta a Brasil US$ 1,17 (R$ 2,73, mientras que si fuera producida en Brasil, el precio sería de US$ 0,41 (R$ 0,95).

El Consejo propone además el inicio de la producción local. Actualmente los laboratorios brasileños fabrican ocho tipos de anti retrovirales, que junto con las nueve importadas se distribuyen a los países que tienen acuerdo de oferta de tratamiento con Brasil: Cabo Verde, Guinea Bisau, San Tomé y Príncipe, Timor Oriental, Bolivia y Paraguay.

El costo promedio de un paciente por año es de US$ 2.500 y el país tiene 163 mil usuarios de anti retrovirales.

La autorización de la licencia compulsoria está permitida por la legislación brasileña cuando trata de cuestiones de salud, nutrición, defensa del medio ambiente, desarrollo tecnológico o socioeconómico. La garantía del derecho consta en el artículo 71 de la Ley de Patentes de Brasil y de acuerdos internacionales que abordan la propiedad intelectual, además de la Declaración de Doha, que aplica los acuerdos a cuestiones de salud pública.

Traducción : Jaime Valderrama