Brasil y Bolivia negocian construcción de polo gas-químico en la frontera

08/07/2004 - 21h29

Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), 9/7/2004 - Brasil y Bolivia dieron el jueves un paso más para incrementar la relación de los dos países en el área energética, especialmente en la producción y comercialización de gas natural. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el presidente de Bolivia, Carlos Mesa, manifestaron intención de construir un polo de gas-químico en la región fronteriza, próxima a las ciudades de Corumbá y Puerto Suárez. "Planeamos instalar en Bolivia un polo gas-químico binacional para industrializar el patrimonio mineral de Bolivia", dijo Lula.

El presidente brasileño también demostró la intención de montar un Centro de Tecnología de Gas, para que el producto se transforme "en un poderoso motor de progreso" tanto para los bolivianos como para los brasileños. En la evaluación de Lula, el pueblo boliviano ha garantizado capacitación en el sector energético para explotar el gas de manera racional, garantizando también resultados económicos favorables al país.

"Brasil quiere ayudar a que se creen condiciones para que Bolivia exporte productos de mayor valor agregado para el mercado brasileño e internacional", dijo Lula.

El presidente de Bolivia, Carlos Mesa, garantizó que el país va a llevar adelante las promesas en el sector energético, y subrayó la importancia de las medidas para la recuperación económica boliviana. "El polo de gas-químico binacional puede aumentar el valor agregado de nuestra materia prima más importante", dijo Mesa.

Además de los avances en el área energética, los dos mandatarios firmaron varios acuerdos bilaterales en los sectores político y económico. Uno de los acuerdos autoriza la libre circulación de brasileños y bolivianos en los territorios fronterizos entre los dos países, así como elimina la necesidad de pasaporte para el ingreso en Brasil y en Bolivia. Otro acuerdo firmado fue el que libera US$ 600 millones del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) para la ejecución de obras viarias, especialmente en la carretera que liga Santa Cruz de la Sierra a Brasil - que será también un camino de Bolivia para el Océano Atlántico.

El gobierno brasileño perdonó gran parte de la deuda boliviana con Brasil, calculada en US$ 48 millones. Los bolivianos van a pagar sólo US$ 2,16 millones y ofrecerán, como contrapartida, el edificio donde hoy se encuentra la Cancillería de la Embajada Brasileña en La Paz. Según el presidente Lula, el acuerdo para el perdón de la deuda "expresa la seguridad de que el pueblo boliviano deberá superar los históricos obstáculos para su desarrollo".

Reportera: Gabriela Guerreiro
Traductora: Alicia Rachaus