Bruno Bocchini
Reportero Agencia Brasil

São Paulo - Entidades del sector empresarial lanzaron este viernes en la Bolsa de Valores de São Paulo (Bovespa) un pacto anticorrupción. El acuerdo entre las insticuciones propone impedir la actividad económica a empresas que adopten la corrupción como forma de gestión. Participaron en la movilización las principales federaciones industriales del país.

Según los organizadores del movimiento, las empresas que se propongan a firmar el acuerdo asumen el compromiso voluntario de actuar con ética y adoptarán procedimientos concretos, como la elaboración y cumplimiento de códigos internos de conducta ética. Los empleados de las empresas pueden denunciar el incumplimento del compromiso, por medio de oidorias que crearán las empresas comprometidas.

El lanzamiento del pacto fue promovido por el Instituto Ethos de Empresas y Responsabilidad Social, la Patri, Relaciones Gubernamentales y Políticas Públicas, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), la Oficina de las Naciones Unidas contra Drogas y Crimen (Unodc) y por el Comité Brasileño del Pacto Global.

El pacto estará a disposición de la sociedad en consulta pública hasta el 9 de marzo de 2006, y el 13 de marzo empieza a aplicarse.

Según la coordinadora de la unidad de Sociedades Estratégicas del Pnud, Marielza Oliveira, no existe todavía un estudio que demuestre cuánto pierde Brasil con la corrupción, aunque los datos de la Onu indican que en el mundo la corrupción anualmente desvía entre US$ 600 mil millones y un billón, 1.500 millones.

El coste económico es incierto, pero el coste social es visible para todos, en forma de colas en el INSS, falta de libros en la escuela, de merienda, dice Oliveira.

El presidente del Comité Brasileño del Pacto Global, Oded Grajew, afirma que el movimiento quiere movilizar a la sociedad para que todos pasen a valorizar más las empresas que firmen el pacto, y que el movimiento va a presionar a los gobiernos municipal, provincial y federal para que sólo compren productos y servicios de los signatarios del acuerdo, concluyendo que el trabajo consiste en valorizar a las empresas que adhieran al pacto y dificultarle la vida a las que no lo hagan.

Traducción : Jaime Valderrama