Daisy Nascimento
Reportera de la Agencia Brasil
Rio - La población brasileña está más escolarizada. Según el Índice de Indicadores Sociales 2004 del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), la media del tiempo de estudio aumentó de cinco años en 1993 para 6,4 años en 2003. Entre los jóvenes de 20 a 24 años, este índice es de 8,5 años. Entre las personas con 25 años o más, sin embargo, la media llega a 6,3 años.
Para la jefa de la División de Indicadores Sociales del IBGE, Ana Lucia Saboia, los indicadores muestran una gran desigualdad entre las diversas clases sociales. "La diferencia en los años de estudio de los 20% más ricos, frente a los 20% más pobres llega a 6,5 años", dijo la investigadora. "La cuestión de la renta todavía es muy importante en la educación".
Al comparar las diversas regiones brasileñas, se ven también disparidades. Mientras la media de tiempo de estudio de la población con más de 10 años de edad en el Sureste brasileño es de 7,1 años, en el Nordeste el índice es de sólo cinco años. En las unidades de la Federación, uno se da cuenta que hay un abismo mayor. El Distrito Federal, por ejemplo, tiene una media de 8,3 años de estudio, contra los 4,4 años de la población de Alagoas, estado que presenta la mayor desigualdad entre las diferentes clases sociales, en la población con 25 años o más.
"Esos datos probablemente muestran que debe haber una mayor distribución de renta para que los indicadores sociales mejoren. Me imagino que, habiendo mejor distribución, la población tendrá más oportunidad de ir a la escuela", dijo la responsable por el estudio.
La profesora de la Facultad de Educación de la Universidad del Estado de Río de Janeiro, Mirian Paura cree que mismo Brasil consiguiendo aumentar la media del tiempo de estudio de la población, eso no es motivo para conmemorar. "Tuvimos un aumento de 1,4 año durante un periodo de diez años (de 1993 para 2003). "¿Será que en 2013 alcanzaremos sólo 1,4 punto?", subrayó.
Según ella, una de las formas para que se alcance un mejor desempeño en la educación brasileña es universalizar la enseñanza secundaria, como sucedió con la primaria, que en 2003 llegó a cerca del 97,2% de la población en edad escolar obligatoria (de 7 a 14 años). "Tenemos casi 200 mil locales de enseñanza regular. El 88,5% son de enseñanza primaria y sólo el 11,5% de enseñanza secundaria. Gran parte de esos municipios no tienen enseñanza secundaria. Esos niños y jóvenes no dan continuidad a sus estudios", añadió Mirian.
Traducción: Alicia Rachaus
