Brasília, 16/2/04 (Agência Brasil - ABr) - La tentativa del gobierno de combinar la política financiera con las reformas sociales es ejemplar para el ministro alemán de Finanzas, Hans Eichel, quien vino a Brasilia para mantener encuentros del G-20, grupo de países emergentes y ricos para amenizar efectos de crisis internacionales, y tras reunirse con el ministro de Hacienda, Antonio Palocci, y el presidente del Banco Central, Henrique Meirelles, sugurió que todos, dentro y fuera del país, apoyen la aplicación de esas políticas.

Eichel también reconoció que las empresas alemanas deben estar más presentes en Brasil, aunque ya tienen una buena representación en el país, y que para ello se harán encuentros internacionales explicando que un argumento para aumentar la participación del capital alemán en Brasil es la política económica del gobierno Lula, como el crecimiento del Producto Interno Bruto del 3,5% proyectado para este año.

En cuanto a las estrategias del G-20, que este año pasa a coordinar Alemania, el ministro dijo que uno de los objetivos del grupo es definir un código de conducta viable con normas claras para lidiar y negociar durante las crisis, como la que enfrentó Argentina. (JV)