Rio, 17/11/2003 (Agencia Brasil - ABr) - Amplia reforma de las policías, creación de comisarías y varas especializadas para averiguar crímenes contra niños y adolescentes y mayor participación de las defensorías y de los ministerios públicos en las averiguaciones. Esas son algunas recomendaciones sobre Brasil que el relator especial de la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Juan Miguel Petit, va a presentar en su informe, durante la 60ª Sesión de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, en marzo.
Según Petit, existen más de 240 rutas nacionales e internacionales de tráfico de explotación sexual actuando en Brasil. Él dijo que la acción de redes de crimen organizado ligadas al narcotráfico y al poder público, tornan difícil el trabajo contra ese tipo de crimen.
Según la evaluación del relator, la explotación sexual es resultado de la pobreza, de la marginalización y de la exclusión social. "El desafío es desarrollar políticas sociales volcadas para las causas de la violencia". (AKR)