En marzo se inauguran primeras cárceles federales en Brasil

03/01/2006 - 19h43

Alessandra Bastos
Reportera Agencia Brasil

Brasilia - La Ley de Ejecución Penal de 1984 determina que Brasil tenga presidios federales, pero sólo ahora se están construyendo cinco cárceles de seguridad máxima. Los dos primeros, en los estados de Paraná y Mato Grosso do Sul, se inauguran en el próximo mes de marzo y los otros tres, en Rio Grande do Norte, Rondonia y Espirito Santo, a fines del año.

Cada cárcel cuesta US$ 7,6 millones y cada preso representa un gasto para los cofres públicos de US$ 630 mensuales, según el Departamento Penitenciario Nacional del Ministerio de Justicia. La diferencia entre las nuevas cárceles y las existentes es que en las primeras cabe al gobierno federal la coordinación, y en las segundas, a los estados.

Las casas de detención abrigarán a presos considerados muy peligrosos e impedirán la articulación de cuadrillas, incluso con los líderes presos. Cada cárcel federales tendrá 200 celdas individuales, dotadas de todos los equipos de seguridad para desarticular las cuadrillas, divididas en cuatro pabellones de 50 celdas, y en cada uno cuenta con lugares para visitas, trabajo, educación y baño de sol, explica el director del departamento, Mauricio Kuehne.

En Brasil hay 360 mil presos en 1.000 penitenciarias, de las cuales el 33% de seguridad máxima.

Traducción : Jaime Valderrama