Alana Gandra
Reportera - Agencia Brasil
Rio de Janeiro – El presidente del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), Guido Mantega, dijo que porque la inflación está bajo control en Brasil, una política de flexibilización de la política monetaria ya es posible y es lo que va a ocurrir. Para Mantega, el gran desafío hoy en Brasil es lograr un crecimiento sostenible con déficit público controlado, equilibrio fiscal, inflación controlada y superávit en transacciones corrientes.
El presidente del BNDES negó que el modelo económico adoptado en el gobierno Lula, basado en el equilibrio fiscal y en el control de la inflación, sea conservador. Según él, el gobierno tiene como objetivos la reactivación de las políticas industrial y agrícola, nueva postura en el comercio internacional e inserción competitiva en el escenario internacional.
Para Mantega, debe de haber una flexibilización de la política monetaria, y la tasa de interés tiene que bajar; lo que va a afectar el cambio, que va a subir, "y con eso vamos a tener una ecuación favorable al desarrollo económico", dijo. Sin mencionar fechas, Mantega afirmó que ese proceso ha comenzado. Él comentó que las tasas de interés alcanzaron el límite y que no van a subir otra vez.
Guido Mantega evaluó que la política monetaria permitirá mejoras en la economía brasileña en el segundo semestre, lo que debe continuar en 2006.
Traducción: Andréa Alves