Brasília - La Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB) se mantiene firme contra la propuesta que quiere alterar las puniciones previstas por la legislación para la práctica del aborto en el país. Este fue el principal asunto de la entrevista concedida por el presidente de la entidad, Don Geraldo Majella Agnelo, el jueves (16), en Brasília, tras la 12ª reunión de los obispos del Consejo Episcopal de Pastoral (Consep), donde se hizo una evaluación sobre las acciones del gobierno brasileño en 2004.
Don Agnelo dijo que la Igresia Católica no puede aceptar cualquier medida contra la vida humana. "No podemos estar de acuerdo con alteraciones en la legislación. Ya no estamos de acuerdo con dos puntos (las posibilidades de autorizaciones judiciales para abortos en casos de estupros y riesgo de muerte de la madre). Todo atentado a la vida, desde su concepción hasta el fin natural, es inadmisible a la diginidad humana".
A partir de enero, una comisión formada por el gobierno federal debe empezar a discutir propuestas de alteración del Código Penal para ampliar las posibilidades legales del aborto. La revisión atiende al Plan de Políticas para las Mujeres, lanzado por la ministra de la Secretaría Especial de Políticas para Mujeres, Nilceia Freire, a inicio de diciembre.
Los obispos consideraron positiva la política del gobierno brasileño de combate a la inflación y la busca por la estabilidad financiera, pero pidieron medidas para que se genere más empleos. "Estamos contentos con las conquistas realizadas y deseamos que la oferta de trabajo mejore para que atienda dignamente a las necesidades de las personas. Que ellas tengan trabajo y una remuneración justa", subrayó el presidente de la CNBB.
Agencia Brasil
Reportero: Saulo Moreno
Traductora: Alicia Rachaus
17/12/2004