Iara Falcão
Reportera de la Agência Brasil
Brasilia - La metodología y la tecnología utilizadas en el procesamiento de la leche humana en los bancos brasileros fueron desarrolladas en el propio país por un equipo de la Fundación Oswaldo Cruz, una institución vinculada al Ministerio de Salud, que desarrolla actividades de investigación, enseñanza y asistencia en el área de salud. Ese hecho contribuyó a la expansión de la red, ya que abarató los costos de implementación de los bancos e imprimió una marca de seguridad en la calidad del producto.
En los bancos de leche brasileros, todos los empleados, desde el técnico responsable hasta el personal de limpieza, pasan por un entrenamiento específico. La recolección es realizada todas las semanas, cuando no todos los días. Un vehículo del banco va a las casas de las donantes a recoger frascos con la leche que ellas consiguieron juntar en el período. Toda la leche recibida pasa por análisis de laboratorio para detectar si tiene bacterias. El líquido contaminado es desechado. Para garantizar la seguridad, la leche que está en buen estado es pasteurizada a 62,5 ºC. En seguida, es congelada por debajo de -18 ºC. En el freezer el alimento dura hasta seis meses y sólo sale cuando es prescrito por los médicos.
Además de la metodología de procesamiento de la leche, los investigadores de la Fiocruz liderados por el actual Coordinador de la Red Brasilera de Bancos de Leche, João Aprígio Guerra de Almeida, consiguieron también abaratar los costos de los bancos. En 1985 los frascos para almacenaje de la leche humana eran importados de Estados Unidos. Hoy, son utilizados frascos comunes con tapas de plástico, recibidos por donación. Según Aprígio, los costos fueron reducidos en un 60%. La pasteurizadora importada también fue adaptada a los bolsillos brasileros. De U$S 17 mil pasó a valer poco más de mil dólares, casi diecisiete veces menos.
La Coordinadora de la Política Nacional de Amamantamiento Materno, Sônia Salviano calcula que es posible crear un banco de leite con U$S 5 mil (R$ 15 mil). "Para una estructura hospitalaria, es extremadamente barato", evalúa. (Traducción: Adital)
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