Brasilia - El ministro de las Ciudades, Olivio Dutra, afirmó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) dio señales de que puede aceptar la propuesta de excluir las inversiones en vivienda y saneamiento básico del concepto de deuda para el cálculo del superávit en países pobres y en desarrollo, explicando que en el discurso de apertura de la Asamblea General de la ONU, el presidente Luiz Inacio Lula da Silva pidió cambios en las reglas de financiamiento del FMI para fortalecer la liquidez necesaria a inversiones productivas, especialmente en infraestructura, saneamiento y vivienda.

Según Dutra, si el FMI acepta la propuesta, Brasil puede contar con el doble de recursos destinados a áreas de vivienda y saneamiento. Desde el inicio del gobierno Lula hasta julio de este año, se contrataron US$ 1.800 millones (R$ 5.100 millones) en abastecimiento de agua, alcantarillado y drenaje urbano. En el área de vivienda el gobierno invirtió US$ 3.200 millones (R$ 8.800 millones), 14 veces más de lo que se invirtió entre 1999 y 2002, añadiendo que se pueden duplicar esas sumas en la medida en que sea posible retirar del concepto de endeudamiento para efecto de superávit los recursos aplicados con ese campo.

Para el ministro, sin una nueva postura de países pobres y en desarrollo ante los organismos internacionales, Brasil no logrará cumplir las Metas del Milenio en cuestiones como la reducción a la mitad del número de personas sin acceso al saneamiento básico hasta 2015, y de mejorar significativamente, hasta 2020, las condiciones de vida de por lo menos 100 millones de habitantes de asentamientos precarios.

Agencia Brasil
Reportera: Juliana Andrade
Traductor: Jaime Valderrama
24/11/2004