Haití es prioridad brasileña en el Grupo de Río

03/11/2004 - 10h46

Río - La obtención de una declaración unísona y concreta de apoyo económico y político a Haití es la principal expectativa brasileña para el documento final que será aprobado en la 18ª reunión del Grupo de Río, que empezó el martes y sigue hasta el próximo viernes, en Río de Janeiro. "Queremos obtener la plena admisión de que esa tarea de recuperar el Haití es responsabilidad de todos", afirmó el embajador Luiz Felipe Macedo Soares, adjunto del canciller Celso Amorim en la presidencia pro tempore del grupo que la ejerce Brasil.

El evento en Río reúne a representantes de Brasil y de otros 18 países de las Américas del Sur y Central, además del Caribe y México. Soares, que en el Ministerio de Asuntos Exteriores ocupa el cargo de subsecretatio general para Sudamérica, recuerda que la reunión puede significar un paso importante para la aproximación económica de esos países. "Después del protocolo firmado con el Pacto Andino, ya están dadas las condiciones para que Sudamérica sea un área de libre comercio. Ahora, vamos a avanzar con Centroamérica y el Caribe. Con México, también tendremos una reunión en 2005".

El embajador destaca como prioridades brasileñas para que conste en el documento final del encuentro el apoyo a dos propuestas. Primero, la acción mundial contra el hambre y la pobreza, apoyada por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en reunión paralela a la Asamblea General de las Naciones Unidas el último mes de septiembre, en Nueva York. Y también la idea de "mecanismos innovadores de financiamiento", lo que incluye el conjunto de cambios que Brasil apoya en los foros internacionales frente los cálculos hechos por los organismos de financiamiento en el presupuesto público de países en situación de endeudamiento.

Hoy, infraestructura es considerada gasto. Brasil propone que pasen a ser contabilizados como inversión. Eso traería beneficios en casos como el riesgo país, que da a los inversores una evaluación sobre la seguridad o no de prestar dinero a un gobierno. Siendo considerados menos endeudados, los países podrían obtener préstamos con intereses más bajos, gastando menos dinero con el aplazamiento de la deuda, lo que ayudaría en la creación de un círculo virtuoso de crecimiento.

Agencia Brasil
Reportero: Spensy Pimentel
Traductora: Alicia Rachaus
3/11/2004