Brasília - Cerca de 10 millones de personas, distribuidas en 588 municipios de 11 estados, localizados a lo largo de los 16 mil kilómetros de frontera de Brasil con distintos países sudamericanos, pasan a tener ahora la oportunidad de trabajo y producción a partir del Programa de Desarrollo Fronterizo, del Ministerio de Integración Nacional.

Según el secretario de Programas Regionales del ministerio, Carlos Gadelha, el objetivo del proyecto es descubrir la vocación económica de una determinada región, capacitar a los ciudadanos, organizar la actividad productiva en cooperativas y presentar líneas de financiación para adquisición de equipos y material.

"Ese es un proyecto más de inclusión del gobierno Lula", dijo Gadelha. De acuerdo con el secretario es necesario que se elimine la idea de que la población fronteriza es marginalizada y ligada al tráfico. "Con ese programa estamos dando oportunidad para que esas personas muestren que saben y pueden hacer excelentes trabajos".

Pero, Carlos Gadelha recuerda que es necesario respetar la diversidad cultural para que los proyectos sean bien sucedidos. El ministerio de Integración Nacional instaló foros en municipios fronterizos para que la población se organice y defina sus prioridades, vocaciones económicas y las raíces del proyecto. Todo eso con un trabajo bien estructurado para cada región. "El trabajo hecho con artesanía indígena en la región Norte no puede ser el mismo de los criadores de ganado del Sur", concluyó.

El Programa tiene aún un grupo de trabajo interministerial que reúne a 21 ministerios para que colaboren dentro de sus áreas de competencia como salud y educación.

Agencia Brasil
Reportero: Paulo Mesquita
Traductora: Alicia Rachaus
13/10/2004