Pekín, 25/5/2004 (Agencia Brasil) - El presidente Luiz Inacio Lula da Silva dijo ayer a empresarios que participaron del Seminario Empresarial Brasil-China de Comercio e Inversión -perspectivas para el siglo 21, que los dos países están dando un salto cualitativo en sus relaciones, que este año cumplen 30 años.

"La relación entre China y Brasil es una relación que deberá crecer tanto en el área política como cultural y comercial", subrayó. Lula destacó la intensificación de las relaciones comerciales y políticas desde 2003. "De enero a marzo de este año, el intercambio entre los dos países tuvo un aumento del 60% con relación al mismo periodo de 2003", dijo, al subrayar el desempeño de flujo de comercio. La balanza comercial es más favorable a Brasil, con exportaciones del US$ 4.500 millones el año pasado.

Catorce acuerdos empresariales fueron firmados durante el seminario. Entre ellos cuatro con la participación de la Compañía Vale do Rio Doce y siderúrgicas chinas, siendo el más importante el que crea con la Shanghai Baosteel Group, una Joint Ventures para la creación de un polo en Maranhão, con la intención de producir 3,8 millones de toneladas de acero.

Otro acuerdo importante se consolidó entre la Petrobras y la Sinopec, para la explotación de petróleo en otros países. Los primeros países previstos para la inversión son Ecuador e Irán.

La Central Termoeléctrica del Sur y la China National Machinery and Equipment Import and Export Corporate (CMEC) van a construir un planta termoeléctrica a carbón en el Río Grande del Sur.

También fueron firmados convenios para la fabricación de motocicletas entre la Compañía Brasileña de Bicicletas y la Jinan Qingqi Motorcyclo.

Fueron arreglados acuerdos futuros. Uno de ellos es entre la Varig y la Air China para la operación de vuelos regulares entre Brasil y China. El otro entre la empresa de exportación Tres Marías y la Chinapack Hua Yuan Internacional Economic Cooperation para la venta de café soluble brasileño.

Reportera: Edla Lula
Traductora: Alicia Rachaus