Brasília, 18/5/04 - Agência Brasil - Agentes de la Policía Federal Estadounidense, autoridades tributarias y aduaneras, y diplomáticos de Argentina, Brasil Estados Unidos y Paraguay intentan encontrar en Buenos Aires, formas de acompañar el envío ilegal de valores para otros países, práctica clasificada entre los crímenes de lavado de dinero.
En el último encuentro del grupo Mecanismo 3+1, los cuatro países reconocieron que las regiones de frontera y los puertos, por ser áreas de gran volumen de operaciones de cambio, merecen un control más fuerte de las autoridades financieras en el flujo de bienes, personas y valores financieros.
En la concepción de los cuatro países, los envíos ilegales de moneda pueden estar vinculados al narcotráfico, el lavado de dinero y principalmente al financiamiento del terrorismo. Un informe publicado el 30 de abril por el Departamento de Estado Norteamericano informa que Brasil está colaborando con las acciones antiterror, aunque enfatiza que la cooperación es limitada por falta de dinero para el combate al crimen.
Aun así el documento asegura que la amenaza de terror es baja en la triple frontera (Argentina, Brasil y Paraguay), y excluye la región de las áreas de preocupación primordial respecto al terrorismo, a pesar de considerar relatos no confirmados de la presencia allí de la red Al Qaeda.
Durante reciente debate sobre Defensa, el subsecretario general de Sudamérica del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, embajador Luiz Felipe de Macedo Soares, dijo que es improbable la posibilidad de que ese grupo tenga células en la región.
Según él, la hipótesis se basa en la presencia de la comunidad de origen árabe en el sur del país, sospecha refutada por Brasil por defender la realidad multiétnica y multicultural en los países sudamericanos.
Participación Brasileña
En la discusión sobre lavado de dinero y combate a los crímenes relacionados, Brasil es modelo en el control de remesas porque todo el sistema financiero nacional es controlado y los bancos están obligados a avisar sobre operaciones sospechosas, explica el director del Departamento de Recuperación de Activos Ilícitos y Cooperación Jurídica Internacional del Ministerio de Justicia de Brasil, Antenor Madruga.
Aun con un buen control de lo que entra y sale de las cuentas corrientes y de inversiones, él indica que la parte de investigaciones y condenaciones judiciales puede mejorar, para lo que apuesta en la eficacia del Programa Nacional de Capacitación para Prevención y Combate al Lavado de Dinero, un proyecto que añade 25 órganos gubernamentales al tema y ha motivado varios seminarios desde su creación, en diciembre.
Madruga explica que el financiamiento del terrorismo es sólo una de las preocupaciones del gobierno sobre el lavado, ya que ningún país está inmune al financiamiento del terror, pero también se preocupa con los crímenes de corrupción.
Según él, el que los países del Mercosur faciliten el flujo de personas y de bienes entre ellos, facilita el crimen de lavado de dinero, y por otro lado indica la posibilidad de mecanismos jurídicos que pueden mejorar las investigaciones y las penas.
Traductor: Jaime Valderrama