Brasília, 15/9/03 (Agência Brasil - ABr) - La ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, anunció hoy las medidas para eliminar el gas clorofluorcarboneto (CFC) de productos como neveras y refrigeradores comerciales e industriales, que destruye la capa de ozono, consistentes en capacitar a los técnicos para que el gas no escape durante la reparación de los aparatos y aprendan a renovarlo sin afectar la capa de ozono. En las aduanas los oficiales identificarán el CFC e impedirán su entrada ilegal al país.

La ministra explicó que es muy importante proteger ese escudo natural llamado capa de ozono, y que si ello no se hace en conjunto tendremos que padecer las consecuencias. Los proyectos de capacitación de personal se harán en compañía con el Servicio Nacional de la Industria (SENAI), la Agencia Alemana de Cooperación (GTZ) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Las inversiones llegarán a US$ 26 millones hasta 2008, a cargo del PNUD, que este año libera 9,5 millones. Para la capacitación de 35 mil técnicos en refrigeración se destinan US$ 3,7 millones y para oficiales de aduana y autoridades de puertos y aeropuertos se liberarán 141.200 en los próximos tres años.

El gobierno va a gastar otros US$ 6 millones para distribuir 12 mil equipos de recolección de CFC y 3,6 millones en la implantación de 10 unidades regionales de reciclaje y regeneración del gas, instaladas en los principales centros consumidores. (JV)