Brasília, 15/08/2003 (Agencia Brasil - ABr) - El presidente Luiz Inácio Lula da Silva conmemoró, el jueves (14), la aprobación de la reforma de la Previsión por la Cámara de los Diputados en cadena nacional de radio y TV. Según el presidente, el país dio "un gran paso rumbo a los cambios que tanto necesita". Él subrayó que ningún gobierno consiguió, en tan poco tiempo (sólo tres meses), aprobar una reforma del tamaño y dimensión que es la reforma de la Previsión. En la
opinión del presidente, la reforma es importante porque garantiza el futuro de las jubilaciones y pensiones a todos, trae equilibrio a las cuentas del gobierno, y de forma definitiva, elimina en el servicio público aquellos altos salarios y jubilaciones absolutamente incompatibles con la realidad brasileña.
La aprobación de la reforma, según Lula, sólo fue posible debido al empeño y voluntad política no sólo del gobierno, pero también de los gobernadores, alcaldes, partidos de la base aliada y de la gran mayoría de los diputados brasileños, "incluso muchos de oposición".
Lula subrayó la participación de la población brasileña. Según él, hubo gran apoyo del pueblo, mismo ante manifestación de algunos sectores de la sociedad.
Las negociaciones hasta la aprobación de la reforma, según el presidente, "con debates", fueron muy intensas, pero se mantuvieron dentro de los principios de la democracia. La reforma de la Previsión, según él, es una demostración clara del estilo de un gobierno "que sabe lo que quiere y que es determinado en la busca de sus objetivos".
El presidente subrayó que el gobierno, sin embargo, no se siente "dueño de la verdad y no tiene miedo de oír y de construir acuerdos". Según Lula, el gobierno va siempre "sentarse a la mesa" para negociar cuando tome decisiones importantes para el país, sea para conversar con empresarios, trabajadores, sindicatos, políticos de izquierda o de derecha. "Y negociar, buscando la mejor solución", añadió. (AKR)