Brasília, 20/7/2003 (Agencia Brasil - ABr) - El gobierno quiere dar en este semestre, velocidad al proceso de crecimiento económico. "Estamos en la fase dos", dijo en entrevista exclusiva a la Agencia Brasil, el ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Luiz Fernando Furlan, al comentar la insistencia del presidente Luiz Inácio Lula da Silva cobrando agilidad en la ejecución de la agenda de inversiones, como sucedió en las reuniones convocadas la pasada semana.
Para Furlan, el control de la inflación es el último compromiso macroeconómico que resta para que Brasil retome la política de desarrollo, con la necesaria reducción de los intereses. Ahora, mantenido el control monetario, él y todo el equipo repiten con Lula la palabra de orden de ese semestre; "crecimiento".
Según Furlan los indicadores fueron recuperados sin dificultades este semestre. "Todo lo que era motivo de gran preocupación en el primer trimestre cambió. Si todo sucede bien, tenemos que usar ese crédito ahora para impulsar la retomada del crecimiento a partir de ese segundo semestre y entrar en el 2004 en ritmo de juego", subraya.
El juego va a empezar en agosto, cuando junto con el Plan Plurianual (PPA), el gobierno va a anunciar su política industrial, priorizando los proyectos y sectores enumerados por el PPA. "Necesitamos dar una inyección de ánimo en el mercado interno", comentó el ministro. En esa fase serán concluidos los estudios hechos por los grupos de trabajo respecto a como serán realizadas las agendas de desarrollo.
Uno de los pilares de esa nueva fase son las Sociedades Público-Privadas (PPP), cuyo proyecto ley necesita ser aprobado por el Congreso Nacional antes del PPA. El proyecto altera las condiciones jurídicas para que Unión, estados y municipios puedan contraer con el sector privado formas de sociedades que no sean las de concesión.
Según Furlan hay medidas importantísimas para el aceleramiento del mercado interno, con efecto en la renta y en el consumo. Entre ellas está la creación de líneas de microcrédito, cuya reglamentación será discutida esta semana.
Otra iniciativa es el Modecarga, programa de financiación para la compra de camiones, que será lanzado en breve. Con recursos del Fondo de Auxilio al Trabajador (FAT), serán invertidos R$ 2,5 mil millones para que se financie entre 12 y 15 mil camiones por año a propietarios que tengan un sólo vehículo, lo que representa un 50% de la flota nacional.
La financiación será de cinco años, con tres de carencia y dos formas de pago. La primera prevé tasa de intereses fija del 20% al año y financiación por medio del BNDES. La otra tendrá intereses variables y financiación repasado por otros establecimientos, como el Banco de Brasil y la Caja Económica.
Hay otras iniciativas consideradas importantes por el ministro para la retomada del crecimiento. "La aprobación de las reformas de la Previsión y Tributaria que darán gran credibilidad al gobierno y eso reflejará un descenso en el riesgo país, que va a posibilitar un descenso de los intereses, lo que favorecerá la retomada de las inversiones", agrega.
Furlan, que es "muy optimista", cree en un crecimiento del 2% del Producto Interno Bruto (PIB) para este año. "Sólo la balanza comercial será responsable por el incremento del 1,5%", añadió. (AKR)
