Argentina y Brasil tienen más convergencias que divergencias

11/01/2006 - 21h01

Mylena Fiori
Reportera Agencia Brasil

Brasilia - Entre Argentina y Brasil las convergencias son mayores que las divergencias, aseguró el ministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, observando que Brasil fue el primer país visitado por el nuevo ministro argentino de Relaciones Exteriores y Comercio Internacional, Jorge Taiana.

Taiana estuvo en Brasil este miércoles acompañado por comitiva del gobierno argentino para preparar la visita del presidente Néstor Kirchner que llega al país el 18 de enero.

Taiana y Amorim trataron los principales temas de interés bilateral, entre los cuales la activación de un programa de trabajo para los más de 20 acuerdos firmados el pasado 30 de noviembre, con gran impacto para la estructura económica de las dos naciones.

También trataron de asuntos económicos y comerciales, como la renegociación de las reglas sobre el comercio de vehículos entre los dos países, y la definición de una Cláusula de Adaptación Competitiva, que limita la entrada de ciertos productos brasileños a Argentina hasta que la industria del vecino país recupere competitividad.

Los dos cancilleres admitieron la posibilidad de actuar conjuntamente ante la Organización Mundial de Comercio, a ejemplo de lo que ocurrió en las delegaciones ante el Consejo de Seguridad de la ONU. Argentina cuenta con un diplomático brasileño en su delegación, en reciprocidad a la participación del diplomático argentino en la delegación brasileña ante el Consejo entre 2004 y 2005.

Entre Argentina y Brasil hay divergencias pero no secretos, afirmó Amorim, y los dos ministros destacaron la cooperación conjunta en el ámbito del G-20 y se comprometieron a aunar esfuerzos para concluir con éxito la ronda de negociaciones en la Organización Mundial de Comercio.

Taiana salió optimista de las reuniones de trabajo en Brasil, afirmando que se hizo un planemamiento que se llevará adelante con entusiasmo para mayor bienestar y desarrollo de los dos pueblos.

Traducción : Jaime Valderrama